Y por eso deja uno de ir a la Iglesia, a todas, a la que sea.
Se supone que la gente va a las iglesias a pedirle a Dios, por sus almas, por su bienestar y el de sus familias, por el mundo, etc., sin embargo, Steven Anderson, pastor de la Iglesia Bautista del Mundo Fiel, quien al enterarse del cambio de sexo de Bruce Jenner y su conversión en Caitlyn, decidió dejar de lado las enseñanzas de perdón y amor al prójimo, para invocar al Dios del antiguo testamento: el que castiga, asesina y destruye, para que de su merecido al «horrible transexual, embajador de los homosexuales».
Entre algunas de las perlas que Anderson dijo, con relación a Caitlyn, destacan:
«Ésta persona es sólo un evangelista de la sodomía y la suciedad en el mundo. Y entonces la gente dice así, como, «Oh, pidámosle a Dios que encuentre a Jesús».»Yo voy a pedirle a Dios que muera y se vaya al infierno».
«Lo odio con odio completo. No, no tengo amor por éste Bruce fenómeno. Deseo que muera hoy. Deseo que muera y se vaya al infierno. ¡Es asqueroso! ¡Es sucio! ¡Es reprobable!…¡deseo que su corazón explote ahora mismo!
«¡Nadie que defienda a ése fenómeno es bienvenido en ésta Iglesia!»
Y pues así, por eso ya nadie va a la Iglesia. Para recibir mensajes de odio, rencor y locuras, la mayoría de las personas vemos las noticias, desde la comodidad de nuestro hogar.
Fuente: http://www.queerty.com